Sospecha clínica de la presencia de un trastorno del sueño: clínica diurna nocturna Flashcards
Cómo ha cambiado el concepto de sueño desde los tiempos de Aristóteles hasta los descubrimientos modernos?
El sueño y la vigilia forman un sistema neurobiológico complejo, regulado por factores fisiológicos y ambientales.
Tradicionalmente, se pensaba que el sueño era un estado pasivo de descanso cerebral.
Sin embargo, con los descubrimientos de las ondas cerebrales por Berger en 1930 y del sueño REM en 1953, se comprendió que el sueño es un proceso activo.
Hoy, el sueño es visto como fundamental para la reparación cerebral, la consolidación de recuerdos y el aprendizaje.
Además, los trastornos del sueño, como el insomnio, representan factores de riesgo para diversas enfermedades.
Cuáles son los principales cambios en la duración y patrones de sueño desde el nacimiento hasta la adolescencia?
El sueño cambia significativamente durante la infancia, adaptándose a la maduración del cerebro y a factores externos, como la luz y las rutinas sociales.
Los recién nacidos duermen entre 16 y 18 horas al día, y sus ciclos de sueño y vigilia se van regulando con la edad.
A los 4 años, la mayoría de los niños solo duerme en una fase nocturna y una siesta, que desaparece a los 6 años.
La duración total del sueño disminuye progresivamente hasta la adolescencia, donde el sueño REM también reduce su duración desde el 50% en el nacimiento hasta el 25-30% en la adultez.
Qué diferencias fisiológicas existen entre el sueño REM y NREM y cómo afectan al cerebro?
Durante el sueño REM y NREM ocurren cambios fisiológicos importantes.
En el sueño REM, se produce atonía muscular excepto en el diafragma y los músculos oculares, lo que facilita el proceso de ensoñación.
El sueño REM también es crucial para el aprendizaje y la consolidación de la memoria.
En cambio, el sueño NREM se caracteriza por una reducción en el metabolismo cerebral, lo que permite el descanso neuronal.
Además, el flujo sanguíneo cerebral y la tasa de oxígeno aumentan durante el sueño REM en comparación con la vigilia, mientras que disminuyen en el NREM.
Cuál es el papel de los procesos homeostático y circadiano en la regulación del sueño?
La regulación del sueño se basa en dos procesos: el proceso homeostático (S) y el circadiano (C).
El proceso S controla la duración y profundidad del sueño, y se relaciona con la acumulación de sustancias como la adenosina durante la vigilia.
El proceso C, impulsado por el Núcleo Supraquiasmático (NSQ) en el hipotálamo, sincroniza los ritmos de sueño-vigilia con el ciclo luz-oscuridad y otras señales externas como las comidas.
La melatonina, producida en la glándula pineal, es esencial para el inicio del sueño y se regula en respuesta a los cambios de luz.
Cómo influye la lactancia materna y la melatonina en la regulación del sueño en los recién nacidos?
En la edad pediátrica, el sueño se ve influido por factores perinatales y postnatales.
Durante el último trimestre del embarazo, el estrés materno y la salud de la madre pueden impactar en el sueño del recién nacido.
En el período postnatal, la relación entre la lactancia materna y el sueño es importante: la melatonina en la leche materna, que aumenta durante la noche, puede favorecer el sueño del bebé al reducir la actividad gastrointestinal nocturna.
También se ha encontrado que la melatonina añadida a fórmulas infantiles puede ayudar al desarrollo temprano de los ritmos circadianos en lactantes.
Cuáles son las principales categorías de trastornos del sueño en la infancia y qué niños tienen un mayor riesgo de padecerlos?
Los trastornos del sueño en la infancia pueden clasificarse en tres tipos: sueño insuficiente, fragmentación del sueño y desajustes entre el ritmo sueño-vigilia y los ritmos circadianos.
Estos problemas afectan especialmente a niños con enfermedades dolorosas, trastornos psiquiátricos, y aquellos diagnosticados con TDAH o trastornos del neurodesarrollo.
Los niños con autismo, discapacidad intelectual o síndrome de X frágil, por ejemplo, presentan una alta prevalencia de trastornos del sueño por diversas causas, incluyendo factores biológicos y del sistema nervioso.
Cómo se define el insomnio infantil y qué tipos de insomnio existen según su duración?
El insomnio infantil es una queja frecuente que puede manifestarse como “dormir mal” o “sueño no reparador”.
El trastorno se define como la dificultad repetida para iniciar o mantener el sueño, afectando el funcionamiento diurno del niño y la familia.
Existen dos tipos de insomnio: el insomnio agudo, con duración menor a 3 meses, y el insomnio crónico, que persiste más allá de los 3 meses.
Las causas del insomnio infantil son diversas e incluyen factores físicos, psicosociales y ambientales, como el estrés de los padres o el ambiente de sueño.
Cuáles son los factores de riesgo y las características epidemiológicas del insomnio infantil?
El insomnio es el trastorno del sueño más prevalente y afecta aproximadamente al 40% de la población, aunque los datos varían según el estudio y los criterios de diagnóstico.
La prevalencia del insomnio es mayor en mujeres y está aumentando en varones e infantes debido a factores sociales. Entre adolescentes, el insomnio se asocia con hábitos como el uso de dispositivos electrónicos y actividades nocturnas.
Además, el insomnio infantil suele coexistir con problemas alimentarios, aumentando la utilización del sistema sanitario y afectando la calidad de vida.
Cuáles son las diferencias entre el insomnio primario y el secundario en la infancia?
El insomnio infantil puede clasificarse en insomnio primario y secundario.
El insomnio primario no se debe a una enfermedad subyacente, mientras que el secundario puede ser causado por trastornos físicos, psiquiátricos o por el consumo de ciertas sustancias.
Los factores biológicos, como enfermedades dolorosas y afectaciones del sistema nervioso central, y los factores sociales, como conductas aprendidas y el ambiente familiar, influyen en el insomnio.
Además, la percepción de los padres sobre el sueño del niño es clave para entender su impacto en la salud familiar.
Cómo influye la afectividad y la amígdala en el sueño de los niños?
La afectividad influye en el patrón de sueño a través de emociones como el miedo, la ansiedad y la conformidad.
La amígdala, que regula estas emociones, desempeña un rol importante en la respuesta a la incertidumbre y en la toma de decisiones sociales.
Esta estructura cerebral, junto con el hipocampo y el locus cerúleo, reacciona a estímulos emocionales que pueden afectar la transición al sueño.
Por ejemplo, la oxitocina y vasopresina fortalecen el vínculo familiar y reducen el miedo, favoreciendo el descanso.
Qué rol desempeña la dopamina en la formación de hábitos de sueño y cómo afecta el estrés este proceso?
La certeza en el patrón de sueño se asocia con la dopamina, que se libera en anticipación a recompensas y promueve la motivación.
En el sueño infantil, la dopamina ayuda a establecer hábitos de sueño al relacionar el descanso con refuerzos positivos.
En situaciones de estrés, el lóbulo frontal pierde su influencia sobre la amígdala, lo que dificulta la calma antes del sueño y aumenta la impulsividad y reactividad emocional, especialmente en niños.
La certeza y la consistencia en los hábitos de sueño son clave para reducir el estrés y mejorar el descanso.
Cuáles son las manifestaciones más comunes del insomnio infantil y cómo varían según la edad?
El insomnio en lactantes y niños pequeños suele manifestarse como dificultad para iniciar el sueño, en la que el niño necesita ciertas condiciones para dormirse, como ser acunado.
En niños en edad preescolar, el rechazo a dormir se asocia con límites poco claros o desajustes en el ritmo circadiano.
El insomnio psicofisiológico es más frecuente en adolescentes y se caracteriza por asociaciones que evitan el sueño, junto con una alerta fisiológica elevada que empeora el descanso.
Qué métodos se utilizan para diagnosticar el insomnio en niños y cómo contribuyen el diario del sueño y la polisomnografía?
El diagnóstico de insomnio en niños es un proceso que se basa en la historia clínica y el examen físico.
Es fundamental considerar antecedentes médicos, psiquiátricos, y el uso de medicamentos que puedan interferir con el sueño.
Además, un diario del sueño, mantenido durante al menos 15 días, permite registrar patrones y condiciones que afectan el sueño.
En algunos casos, se pueden requerir pruebas complementarias como la polisomnografía o la actigrafía para obtener una evaluación objetiva del sueño y descartar otras causas de insomnio.
Cuáles son los componentes principales del tratamiento del insomnio en atención primaria?
El tratamiento del insomnio infantil en atención primaria se centra en mejorar la cantidad y calidad del sueño, reducir el impacto diurno y promover buenos hábitos.
Las terapias cognitivas-conductuales (TCC), como el control de estímulos, la restricción del sueño y los ejercicios de relajación, son intervenciones efectivas.
La terapia cognitiva ayuda a los niños y a sus familias a reestructurar pensamientos y creencias erróneas sobre el sueño.
La educación en higiene del sueño es una herramienta básica, aunque insuficiente como única intervención.
En qué consisten las terapias cognitivas-conductuales para el insomnio infantil y cómo se aplican?
Las terapias cognitivas-conductuales (TCC) son esenciales en el manejo del insomnio infantil.
Incluyen el control de estímulos para asociar la cama con el sueño, la restricción del tiempo en cama, y la reestructuración cognitiva para modificar creencias sobre el sueño que incrementan la ansiedad.
Las TCC se aplican en atención primaria y deben revisarse periódicamente en el seguimiento.
La combinación de estas técnicas ha demostrado ser eficaz en la reducción de los síntomas de insomnio en la infancia.
Cuáles son los criterios para derivar a un paciente con insomnio infantil a un nivel de atención secundaria?
Parasomnias?
Cuáles son las diferencias entre terrores nocturnos y pesadillas?
En la mayoría de los casos, el insomnio infantil se maneja en atención primaria.
Sin embargo, ciertos casos requieren derivación a unidades de sueño o especialistas, especialmente si hay trastornos del sueño complejos, como apnea del sueño, síndrome de piernas inquietas o parasomnias.
También se recomienda derivar cuando el insomnio es parte de una condición psiquiátrica que necesita tratamiento especializado o cuando el paciente no responde a las intervenciones iniciales en atención primaria.
La parasomnia es un trastorno del sueño que implica conductas o eventos anormales durante el sueño o sus transiciones. Puede ocurrir en la fase NREM, como sonambulismo, terrores nocturnos o despertares confusionales; en la fase REM, como pesadillas o trastorno del comportamiento del sueño REM; y otras formas, como parálisis del sueño o enuresis. Estas alteraciones pueden ser benignas o afectar la calidad del sueño y la seguridad. Su tratamiento depende de la causa y gravedad.
Diferencias entre terrores nocturnos y pesadillas:
Los terrores nocturnos ocurren en la fase NREM, principalmente en las primeras horas de la noche. Se caracterizan por gritos, movimientos bruscos, confusión y dificultad para despertar. No se recuerdan al despertar y son más comunes en niños.
Por otro lado, las pesadillas suceden en la fase REM, generalmente en la segunda mitad de la noche. Son sueños desagradables que se recuerdan al despertar, sin movimientos físicos significativos y con fácil despertar.
Los terrores suelen deberse a inmadurez del sistema nervioso, mientras que las pesadillas están relacionadas con estrés, ansiedad o traumas.