Quemaduras Flashcards
Primeros Auxilios
El tratamiento inmediato de las quemaduras debe consistir en las medidas siguientes:
Apagar las llamas
<p>Apagar las llamas haciendo rodar al niño en el suelo. Cubrir al quemado con una manta, un abrigo o una alfombra. </p>
ABC
Despojar px de ropas y accesorios
Fase edematosa 24-72
Una vez comprobada la permeabilidad de la vía aérea, hay que despojar al paciente de la ropa que siga en combustión lenta o que esté impregnada de líquido caliente. Deben retirarse las joyas, en especial anillos y pulseras, incluso cortándolos, para evitar la constricción y el compromiso vascular durante la fase edematosa en las primeras 24-72 horas siguientes a la quemadura.
Quemaduras químicas
Sacudir con cepillo
Copiosa irrigación
Centro de toxicología – agente neutralizante
En caso de quemaduras químicas sacudir con un cepillo cualquier resto químico en polvo o sólido, y a continuación realizar una copiosa irrigación o lavar la zona afectada con agua. Llamar al centro de toxicología local para conocer el agente neutralizante para tratar una ingestión química.
Paños y compresas
Contraindicación >15% SC
Cubrir la zona quemada con paños secos y limpios y aplicar compresas húmedas y frías (no heladas) sobre las lesiones pequeñas. Las lesiones por quemaduras en zonas extensas (>15% de SC) disminuyen la regulación de la temperatura corporal y contraindican la aplicación de compresas frías.
Quemaduras por alquitrán caliente
Si la quemadura es causada por alquitrán caliente, usar aceite mineral para eliminarlo. Sustancia densa y pegajosa, de color oscuro y olor fuerte, que se obtiene por destilación del petróleo, de la madera, del carbón vegetal o de otra materia orgánica y se emplea principalmente en el calafateo de buques, revestimiento de tuberías, en la industria farmacéutica y como impermeabilizante en la pavimentación de caminos.
Analgésicos
Paracetamol (acetaminofeno) Diclofenaco Ibuprofeno Ketoprofeno Naproxeno
Tratamiento de Urgencia
Las medidas de soporte vital son las siguientes
ABC y patologías preexistentes
- Revisar rápidamente el estado cardiovascular y pulmonar, y documentar las patologías preexistentes (asma, cardiopatía congénita, enfermedad hepática o renal).
Oxígeno humidificado
Edema facial o faríngeo
Hipoxia o intoxicación por CO
Asegurar y mantener una vía aérea adecuada y proporcionar oxígeno humidificado mediante mascarilla o intubación endotraqueal (fig.75-1). Esto último puede ser necesario en niños con quemaduras faciales o con quemaduras sufridas en un espacio cerrado, antes de que aparezca edema facial o faríngeo. Si se sospecha hipoxia o intoxicación por monóxido de carbono, debe utilizarse oxígeno al 100% (v. caps.67 y71).
Reanimación con líquidos intravenoso o interóseo
Reanimación con líquidos intravenoso o interóseo
Evaluar lesiones asociadas
Evaluar las lesiones asociadas, frecuentes en los pacientes con antecedentes de quemaduras por corrientes de alta tensión, en especial si la víctima sufrió una caída desde una altura. Puede haber lesiones de la columna vertebral, de otros huesos o de órganos intratorácicos o intraabdominales (v. cap. 72). Hay que proteger la columna cervical del niño hasta que se descarten lesiones a este nivel. Existe un riesgo muy elevado de alteraciones cardíacas, como taquicardia ventricular o fibrilación ventricular, secundarias a la conductividad de las corrientes eléctricas de alto voltaje. La reanimación cardiopulmonar debe practicarse con rapidez en el lugar del suceso y debe conectarse al paciente a un monitor cardíaco en cuanto llegue al servicio de urgencias (v. cap. 67).
Control de líquidos orales y sonda nasogástrica
Evaluar las lesiones asociadas, frecuentes en los pacientes con antecedentes de quemaduras por corrientes de alta tensión, en especial si la víctima sufrió una caída desde una altura. Puede haber lesiones de la columna vertebral, de otros huesos o de órganos intratorácicos o intraabdominales (v. cap.72). Hay que proteger la columna cervical del niño hasta que se descarten lesiones a este nivel. Existe un riesgo muy elevado de alteraciones cardíacas, como taquicardia ventricular o fibrilación ventricular, secundarias a la conductividad de las corrientes eléctricas de alto voltaje. La reanimación cardiopulmonar debe practicarse con rapidez en el lugar del suceso y debe conectarse al paciente a un monitor cardíaco en cuanto llegue al servicio de urgencias (v. cap.67).
Catéter de Foley
Se debe insertar un catéter de Foley para monitorizar la diuresis en todos los niños que necesitan reanimación con líquidos intravenosos.
Paños estériles a la espera
Todas las lesiones deben cubrirse con paños estériles hasta que se adopte la decisión de tratar al paciente en régimen ambulatorio o enviarlo a un centro de tratamiento especializado.
Gasometría arterial
Debe medirse el nivel de monóxido de carbono (carboxihemoglobina [COHb]) en todas las víctimas de incendios y administrarse oxígeno al 100% hasta que se conozca el resultado.
DTPa o Tdpa
Debe revisarse el estado vacunal del niño: en las quemaduras de menos del 10% de SC no se necesita profilaxis antitetánica, pero sí en las que afectan a más del 10% de SC. Para la profilaxis antitetánica en niños menores de 11 años se administrará la DTPa (difteria, toxoide tetánico y tos ferina acelular) y en los mayores de 11 años Tdpa (tétanos, difteria y tos ferina) (v. cap.211).
Clasificación de las Quemaduras
La clasificación y el tratamiento adecuados de las quemaduras obliga a valorar la extensión y profundidad de la lesión (tabla 75-4 y fig. 75-2).
1er grado
Inflamación, eritema, dolor
Dolor por 48-72hrs
Las quemaduras de primer grado afectan sólo a la epidermis y se caracterizan por inflamación, eritema y dolor (similar a una quemadura solar leve). El daño tisular suele ser mínimo y no se forman ampollas. El dolor desaparece en 48-72 horas y, en un pequeño porcentaje de pacientes, el epitelio dañado se desprenderá posteriormente sin dejar cicatrices residuales.
2do grado
Vesículas, ampollas, dolor
Superficiales, intermedias o profundas
Las quemaduras de segundo grado afectan a toda la epidermis y a una porción variable de la dermis (la formación de vesículas y ampollas es característica de estas quemaduras). Una quemadura de segundo grado superficial es muy dolorosa porque quedan expuestas numerosas terminaciones nerviosas viables. Estas quemaduras superficiales de segundo grado curan en 7-14 días, a medida que se regenera el epitelio en ausencia de infección. Las quemaduras de segundo grado intermedias o profundas cicatrizan de forma espontánea si las lesiones se mantienen limpias y sin infección. El dolor es menor que en las quemaduras más superficiales, porque hay pocas terminaciones nerviosas que sigan siendo viables. La pérdida de líquidos y los efectos metabólicos de las quemaduras dérmicas profundas (de segundo grado) son esencialmente iguales que en las de tercer grado.
3er grado
Retracción de la herida o injerto cutáneo
Las quemaduras de todo el espesor de la piel, o de tercer grado, suponen la destrucción de toda la epidermis y la dermis, sin que queden células epidérmicas residuales que puedan regenerar la zona lesionada. Estas zonas quemadas no pueden epitelizarse y sólo curan mediante la retracción de la herida o con un injerto cutáneo. La ausencia de dolor y de relleno capilar demuestra la pérdida de los elementos nerviosos y capilares. La aplicación del Doppler se ha convertido en una herramienta valiosa para la valoración de la profundidad de la quemadura y para valorar su potencial de curación.
Calculo de SC Quemada
Para calcular el área de SC afectada por una quemadura se deben utilizar las gráficas de quemaduras adecuadas correspondientes a los distintos grupos de edad de los niños. El volumen de líquido necesario para la reanimación se calcula una vez determinadas la extensión y la profundidad de la quemadura. La morbimortalidad de una quemadura también depende de la extensión y la profundidad. La tasa de crecimiento variable de la cabeza y los miembros durante la infancia obliga a utilizar gráficas específicas de SC, como la gráfica modificada de Lund y Brower o la gráfica del Shriners Hospital for Children de Boston (fig.75-3).
La regla de los nueve
> 14 años
La regla de los nueves usada en adultos puede utilizarse sólo en niños mayores de 14 años, o como cálculo aproximado para iniciar el tratamiento antes de trasladar al paciente a un centro de quemados. es un método que se utiliza para calcular la extensión cutánea quemada en un paciente. Consiste en dividir la superficie del cuerpo en áreas equivalentes al 9% de la superficie corporal total queimada (SCTQ) o por múltiplos de 9.
<p>La regla de la palma
| >1% SC</p>
<p>En las quemaduras pequeñas que afectan a menos del 10% de SC se puede emplear la regla de la palma, sobre todo en los pacientes tratados en régimen ambulatorio. En los niños, la superficie comprendida entre el borde de la muñeca y la base de los dedos (la palma de la mano) corresponde al 1% de SC. El cálculo consiste en extrapolar ese 1% de la mano del niño afectado, a la mano del que eval™a, y desde ahí a la superficie corporal quemada. La extensión equivale a cuantas veces cabe dentro de la lesión ese 1% extrapolado a la mano del que evalúa.</p>