Tema 1: CARACTERÍSTICAS POLÍTICAS, ECONÓMICAS Y SOCIALES DEL ANTIGUO RÉGIMEN. LA POLÍTICA CENTRALIZADORA DE LOS BORBONES. Flashcards
CARACTERÍSTICAS POLÍTICAS, ECONÓMICAS Y SOCIALES DEL ANTIGUO RÉGIMEN
- En el plano político, el absolutismo monárquico, en donde el monarca impone su criterio. La política del Antiguo Régimen se caracterizó por la centralización y porque los intereses del Estado se confundían con los dinásticos, situación mantenida por un fuerte ejército y una burocracia excesiva.
- En el plano económico, predominio absoluto del sector primario, lo que conlleva un estancamiento económico casi permanente (crisis de subsistencia).
- En el plano demográfico, el crecimiento poblacional se mantenía dentro de la llamada “fase tradicional demográfica” caracterizada por la estabilidad,
consecuencia de los elevados índices de natalidad (35-50%o) y mortalidad (30-40 %o). El resultado es un crecimiento vegetativo mínimo, mermado a veces por mortalidades catastróficas. - En el plano religioso dominaba la creencia en el determinismo divino, aunque a lo largo del siglo XVIII la concepción determinista será sustituida por la concepción racionalista de la igualdad de los seres humanos. Voltaire proclama la igualdad de los hombres con respecto a los derechos naturales de libertad, propiedad y protección legal.
- En el plano social, la sociedad del siglo XVIII tendía a ser aristocrática, y se componía de tres órdenes o estamentos: clero, nobleza y tercer estado o estado
llano. Cada uno de estos estamentos se diferenciaba de los otros por tener un código de leyes propias que les concedía unos privilegios o unos derechos.
La crisis del Antiguo Régimen
Parte de las transformaciones que supone la Ilustración en todos los órdenes: social, político, económico y religioso. Cuando las ideas de la Ilustración basadas en la crítica del absolutismo y del poder de la Iglesia llegaron a la radicalización expuesta por Rousseau en su obra Contrato Social, la ruptura con la sociedad tradicional será un hecho:
- En política, las ideas de Rousseau tienden a la democracia y a la igualdad política poniendo como base el “pacto social”.
- En economía, las tendencias individualistas sostenidas por los ilustrados dejarán a un lado las reglamentaciones y restricciones del intervencionismo
gubernamental, perfilándose las teorías económicas del liberalismo de Adam Smith.
- En el aspecto social, “la opresión, la pobreza y las calamidades del mundo son sólo consecuencia de la ignorancia” (Emilio, de Rousseau). Con este credo los
ilustrados cambiarán el curso de la Historia. Será la burguesía enriquecida, pero sin derechos políticos, la que asuma el papel protagonista en la difusión de los
nuevos planteamientos ideológicos.
La Ilustración
El siglo XVIII es el llamado Siglo de las Luces o de la razón. La Ilustración es una corriente filosófica que nace como consecuencia de los cambios socioeconómicos de finales del siglo XVII y comienzos del XVIII, y que ocasionan una profunda revolución intelectual que es el resultado del racionalismo de Descartes y el cientifismo de Newton.
El Despotismo Ilustrado
Cuando nace la Ilustración estaba en pleno apogeo el
absolutismo monárquico, y la Ilustración lo encontrará adecuado para realizar sus reformas apoyándose en el rey. Por eso la monarquía se apropia de muchos de los objetivos ilustrados. Su lema era “todo para el pueblo, pero sin el pueblo”.
Felipe V
(1700-1724-1746) Felipe se convierte en el primer Borbón de la línea dinástica española. En 1701 juró como rey de España ante las Cortes castellanas. Los conflictos entre Habsburgos y Borbones, y la alineación de los antiguos reinos de la Corona de Aragón en favor de los Austrias, desencadenaron la Guerra de Sucesión española. Acabada ésta, por los tratados de Utrecht y Rastadt la monarquía española perdió los territorios europeos en Italia y en los Países Bajos. Su logro fundamental fue el de la centralización y unificación administrativa y la creación de un Estado moderno. La acción exterior se determinó por el revisionismo de las decisiones de Utrecht y por la alianza familiar con Francia.
Luis I
(1724) En 1724 Felipe V abdicó en su hijo Luis I (enero-agosto), pero este murió a los pocos meses y nuevamente Felipe V ocupó el trono.
Fernando VI
(1746-1759) Siguió el proceso centralizador emprendido por Felipe V ,saneando la Hacienda pública, reorganizando el ejército y la Armada, fomentado las industrias nacionales. También envió misiones científicas y técnicas al extranjero, repobló Sierra Morena a instancias de Pablo de Olavide y mandó realizar el primer Catastro de fincas rústicas español.
Carlos III
(1759-1788) Él y sus ministros no simpatizaban con Inglaterra. Por esta razón el rey firmó con Francia en 1761 el Tercer Pacto de Familia para defender sus respectivos intereses. A este Pacto se agregaron después los Borbones italianos. Por esta razón hubo de apoyar a Francia contra Inglaterra en la Guerra de los Siete Años (1756-1763), perdiendo algunos territorios.El equipo gobernante, formado por españoles iba a realizar la tarea de las grandes reformas socioeconómicas, quizá de un modo menos espectacular que en la primera etapa, pero más continuado y profundo. Carlos III reorganizó la enseñanza, envió expediciones científicas, mejoró la administración de las colonias, abolió las encomiendas y el reparto de los indios, y dictó la Pragmática del comercio libre que contribuyó al desarrollo mercantil de las posesiones ultramarinas.
Carlos IV
Los comienzos de su reinado coinciden con el estallido de la Revolución Francesa. Entró en crisis la vieja sociedad y se abrió la posibilidad de un primer intento de revolución liberal. Cuando en 1789 estalla la Revolución Francesa, Carlos IV y su ministro Floridablanca, toman la táctica de crear un “cordón sanitario” en la frontera para evitar el conocimiento de la situación en Francia. Mientras tanto, los revolucionarios franceses se organizaron con gran habilidad diplomática y persuadieron a Carlos IV de que la política que llevaba Floridablanca no beneficiaba a su gobierno. A esto se unieron las intrigas de la Reina Mª. Luisa, que consideraba a Floridablanca como un obstáculo para el ascenso de su favorito Godoy. Carlos IV relevó a Floridablanca de su puesto, colocando en su lugar al ya anciano Conde de Aranda, que fue destronado en 1792 proclamándose la república en Francia, le llenó de desprestigio, siendo sustituido por el joven Manuel Godoy. Godoy fijo su atención hacia la política exterior: hizo todo lo posible por salvar a Luis XVI y, al no conseguirlo, España se unió a otras potencias del Antiguo Régimen y declaró la guerra a Francia (Guerra de la Convención 1793- 1795). Entonces Godoy decidió cambiar de política y firmar la paz: en 1795 se firmó la Paz de Basilea, restituyendo Francia a España las tierras conquista. En 1802 Francia e Inglaterra firman la paz pero enseguida reanudan sus hostilidades, y España se ve envuelta en otra guerra. Las posesiones americanas quedan incomunicadas y el hundimiento económico de España se hace imparable. Así, a finales de 1807 la situación interna del país era caótica: - bancarrota de la Hacienda, a causa del descontrol en el gasto y del endeudamiento por las sucesivas guerras - desprestigio de las instituciones. La figura de Godoy era objeto del mayor escarnio, pero también se criticaba a los propios reyes, Carlos IV y María Luisa, por sostenerle en el poder. La nobleza, que le despreciaba por su origen plebeyo y por haberla apartado del poder, se unió en torno al príncipe heredero Fernando, que no dudó en conspirar contra sus padres para acabar con el favorito. El clero no le perdonaba que siguiera adelante con las desamortizaciones y que persiguiera al Santo Oficio, y clamaba contra el mal gobierno convenciendo a las clases populares de que Godoy era el culpable de todos los males. La población veía en el heredero, Fernando, a un salvador del país y de la dinastía.
Guerra de Sucesión
(1701-1713) Se trató de un conflicto internacional que enfrentó a la Francia de Luis XIV contra un grupo de estados aliados: Gran Bretaña, Holanda y Portugal, que apoyaban al Imperio Austríaco en la persona del Archiduque Carlos de Habsburgo. Por otro lado fue una guerra civil entre el bando felipista – Castilla, Navarra y Vascongadas, que apoyaban al Borbón – y el bando habsburguista – Aragón, Cataluña y Valencia –, fiel al archiduque Carlos, el pretendiente austriaco al trono español.
Terminó con el triunfo de Felipe V. Y Carlos de Habsburgo heredó en 1711 el Imperio alemán y se desinteresó de su aspiración a reinar en España.
Decreto de Nueva Planta
Tras la victoria de Felipe V, los métodos de gobierno y administración de los ministros Orry y Amelot, que reorganizaron los servicios públicos, arruinaría las autonomías de los antiguos reinos. Muestra de ello es el llamado Decreto de Nueva Planta, que anuló los privilegios forales catalanes y mallorquines en 1716.
Motín de Esquilache
(1766) Carlos III trajo consigo de Nápoles a ministros competentes, pero mal vistos por los españoles, como Grimaldi y Esquilache. Este último intentó adecentar Madrid con reformas en la política urbana, empedrado, alumbrado, construcción de edificios públicos… Pero cuando intentó modificar la indumentaria de los habitantes de la Villa recortando la clásica capa española, se promovió un motín que tuvo que marcharse a Italia.
Principales características del liberalismo económico
- Plena libertad económica.
Mediante la ley de la oferta y la demanda los liberales clásicos consideran regula el precio de las mercaderías y además que reasigna el uso de los capitales y la mano de obra a aquellos que más demandan los consumidores. - El derecho de cada hombre de disponer libremente de su trabajo. Cada individuo en particular pone todo su cuidado en buscar el medio más oportuno de emplear con mayor ventaja el capital de que puede disponer. Lo que desde luego se propone es su propio interés, no el de la sociedad en común: pero estos mismos esfuerzos hacia su propia ventaja le inclinan a preferir, sin premeditación suya, el empleo más útil a la sociedad como tal.
Reformismo del siglo XVIII ante los problemas de España
- En el plano económico-social el país, a semejanza de lo que ocurre en Europa Occidental, conoce una fuerte expansión que coincide con el reinado de Carlos III, precedida de una estabilización con Felipe V y Fernando VI, y que termina en inflación con Carlos IV
- En el plano político, con el Despotismo Ilustrado aparece como en el resto de Europa Occidental
- En el plano cultural, la Ilustración española se diferencia de la europea por su contenido religioso