Otto Final Flashcards
LA AYUDANTE: ¿Hay algún problema?
TODOS: No, no, no.
LA AYUDANTE: Pero si he escuchado golpes…
TODOS (cada uno señala hacia un lugar diferente, disimulando): No, fue allí, una cosa que…
FRED: Perdona Otto, ¿cuántas veces te hemos nombrado al animarte?
OTTO: No tengo ni idea.
CAMILO: Es posible porque… (bajando el tono) no lo conté.
TODOS: ¿¿¿Cómo???
CAMILO: Ni cuenta me dí, lo siento.
OTTO: Eso es genial.
FRED: No sé. No pensar tanto en uno. Olvidarse de sí mismo.
OTTO: ¿Por qué dice eso?
FRED: ¿No han percibido ningún comportamiento extraño esta tarde?
TODOS: No…
FRED: ¿Nadie?
TODOS: No.
MARÍA: ¡Ay, es un milagro!
OTTO (pensativo): ¡Wow!, es verdad.
LILÍ: Ya, pero ¿tú te diste cuenta no?
OTTO: Como María se asfixiaba, me centré en lo más urgente.
LILÍ: Y tres aún mejor. Y tres aún mejor.
OTTO: ¿Tres por qué? ¿Hay un tercero?
LILÍ: Tercero no. ¡Tercera! Tercero no. ¡Tercera!
TODOS: ¿Quién?
FRED: ¡Exacto!
OTTO: Pero entonces, ¡lo que está pasando aquí es muy grande! Creíamos que nadie lo había conseguido y resulta que es lo contrario.
CAMILO: Qué bonito, Fred. Vamos, ¡ni Paulo Coehlo! (Pausa) Ya ven. A lo tonto, a lo tonto… ¡50 % de éxito!
OTTO: A lo mejor hay alguien más y no nos hemos dado cuenta.
BLANCA (gritando desde el baño, en off): ¡Ya está, ya lo tengo!
TODOS: ¿Qué?
MARÍA: Ay, pues para ser sincera, estaba tan indignada con el taxista que ni lo pensé.
OTTO: Si admitimos entonces que María ha vencido a su TOC, entonces solo nos quedan dos. (A Fred) Usted Fred y Lilí.
FRED: Sí, pero ya les dije que yo no cuento.
OTTO: En ese caso intentemos recordar si Lilí olvidó repetir algo
LILÍ:, Lo he repetido todo-todo desde el principio. Lo he repetido todo-todo desde el principio.
OTTO: Espera, no te des por vencida antes de empezar.
CAMILO: ¡Ohhh! Cuanto la quiere a su amorcito.
OTTO: A veces te pones tan pesado…
CAMILO: Relajate, no hay vergüenza ninguna porque alguien te guste.
OTTO: No me da vergüenza y además si Lilí quiere que nos sigamos viendo, mi teléfono es el 442 544 5244.
CAMILO: No tiene por qué. A lo mejor se arrejuntan a vivir ‘en pecado’.
OTTO: Lilí, ¿estás segura que desde que llegaste lo has repetido absolutamente todo? Pero, ¿todo- todo-todo?
LILÍ: ¿Pero dos letras, eso cuenta? ¿Pero dos letras, eso cuenta?
OTTO: Pues claro que cuenta.
LILÍ (a Otto): Un segundo no es mucho que digamos. Un segundo no es mucho que digamos.
OTTO: Vale, pero ¿cuántas veces te ha pasado en los últimos diez años?
LILÍ: ¿Aprox? (Camilo se ríe) Nunca. ¿Aprox? (Camilo se ríe) Nunca.
OTTO: Entonces ese segundo tiene mucho valor, porque es… como una brisa de esperanza. ¿Lo entiendes? Si lo entiendes, respóndeme ‘sí’, pero una sola vez, por favor.
LILÍ: Gracias. Gracias.
OTTO: Al final, no nos salió mal la jugada, así entre nosotros.
LILÍ: Y no creo que el Doctor Cooper lo hubiera hecho mejor, sinceramente.
TODOS: Exacto.
LILÍ: Y no creo que el Doctor Cooper lo hubiera hecho mejor, sinceramente.
TODOS: Exacto.
MARÍA: ¿En.. en serio? Muy amable, aceptaré su oferta entonces.
OTTO (a los demás): Al final estos terminan juntos.
CAMILO: Déle las gracias por no haber venido. Porque no sé lo que habríamos hecho con él, pero me extraña que hubiera sido mejor…
OTTO: Bien dicho.
CAMILO (a Lilí, mientras reparte sus tarjetas): Ten, para ti dos.
OTTO (dándole un abrazo): Aunque esta mañana no nos conocíamos, desde esta tarde será usted… alguien importante en mi vida.