Fases militares de la Guerra Civil. La evolución política y económica en las dos zonas. Consecuencias económicas y sociales de la guerra. Los costes humanos Flashcards
La primera fase de la guerra civil
consistió en el cruce del estrecho. Ambos bandos eran conscientes de la importancia estratégica de
Madrid. Franco cruza a la península utilizando la aviación italiana y alemana. En una semana Franco dispone en la
península de 14.000 hombres muy bien armados. Los primeros gobiernos de Casares Quiroga y Martínez Barrio
tuvieron que dimitir al negarse a entregar armas al pueblo por temor a una revolución. El poder pasó a Giral, que
entregó armas al pueblo pero su incapacidad para controlar la situación le obligó a dimitir (septiembre del 36).
La segunda fase de la guerra civil
es la batalla de Madrid (septiembre del 36 - marzo del 37): los militares sublevados intentan
concentrar sus fuerzas en torno a la capital. Mola acude desde el Norte y Franco desde el sur, aunque más
lentamente porque tiene que tomar Badajoz y se detiene a liberar el Alcázar de Toledo que al mando de
Moscardó resiste el asedio republicano. Sin embargo la capital resiste gracias a la defensa del ejército leal y de la
milicia. Ante esta resistencia los nacionales deciden aislar Madrid del resto de España, estableciendo un cerco. Sin
embargo el cerco fue roto tanto en el Jarama (febrero del 37) por la resistencia de las tropas de Lister como en
Guadalajara (Marzo del 37) donde los italianos fueron frenados. Desde la Ciudad Universitaria la ciudad fue
duramente bombardeada por italianos y alemanes, pero Madrid resiste bajo el grito de “no pasarán”… Los
sublevados deciden entonces abandonar la toma de la capital y dirigir su atención a otras zonas estratégicas.
Paralelamente, y para dar un respiro a Madrid, los republicanos concentran su esfuerzo en Aragón pero no se
consigue entrar en ninguna capital aragonesa. En la zona republicana se da el gobierno de Largo Caballero
(septiembre de 1936 – mayo de 1937) de coalición en el que participaron todos los sectores.
La tercera fase de la guerra civil
fue la campaña del Norte (abril- octubre de 1937). El primer objetivo era la franja cantábrica,
aislada del resto de España (por Castilla y Navarra) y poseedora de una importante minería e industria
siderometalúrgica. En esta campaña juega un importante papel los bombardeos de la aviación alemana (Legión
Cóndor) como en el caso de Guernica, donde el 70% de la ciudad fue destruida. En junio cae Bilbao y en octubre
Santander y Gijón. Los republicanos intentaron dar un respiro al Norte con una ofensiva en Brunete, en julio del
37, pero ni consiguen levantar el sitio de Madrid ni impedir la caída del Norte, que queda en manos nacionales.
La cuarta fase de la guerra civil
la campaña de Aragón (septiembre del 37- otoño del 38). En diciembre del 37 el ejército
republicano, con ayuda de las Brigadas Internacionales, toman la ciudad de Teruel pero en febrero del 38 una
contraofensiva nacionalista la recupera. El gobierno de Negrín (mayo 1937- abril 1939) continuó con la política de
control y centralización. Negrín intentó establecer unas condiciones mínimas para negociar la paz: democracia,
sufragio universal, reforma agraria, libertad de conciencia, libertades regionales, amnistía general, etc., que
Franco no aceptó. La pérdida de Teruel permite el avance nacional por Aragón y Castellón. Para frenarles el
ejército republicano concentra sus efectivos en el Ebro, donde se va a dar la mayor batalla de la guerra, la Batalla
del Ebro del 25 de julio al 15 de noviembre de 1938. La derrota del ejército republicano deja la zona republicana
dividida y Cataluña aislada.
La quinta etapa
es la campaña de Cataluña (invierno 1938-39), que da paso al final de la guerra; una tras otra
caen las capitales catalanas (Tarragona, Barcelona y Gerona), sin casi oponer resistencia, pasando el control de la
frontera a manos nacionales. El gobierno republicano, ya en el exilio, intenta negociar la paz pero Franco prefiere
una paz incondicional. Desaparecido el frente de Cataluña, el general Casado se opuso a la política de resistencia
de Negrín, y se sublevó; constituyó (4 marzo 1939) el Consejo nacional de defensa, junto con Julián Besteiro, y
aplastó la resistencia de las fuerzas fieles al gobierno. Sus propósitos de obtener una paz negociada con Burgos
fracasaron y Julián Besteiro tuvo que aceptar la rendición sin condiciones impuesta por Franco. En marzo termina
la resistencia en Levante y en el resto de España al entrar las tropas nacionales en Madrid, desde donde se emite
el último parte de guerra, el 1 de abril de 1939.