Bloque 8 Flashcards
Bloque 8-1 Crisis de 1898. 1/4
Explica cómo sucedio la crisis de 1898
La regencia de María Cristina (1885-1902) tuvo que afrontar una gran crisis del sistema: la crisis del 98, que se identifica con las guerras de independencia de las últimas colonias (Cuba, Puerto Rico y Filipinas) y la pérdida de éstas.
El marco internacional del momento era una etapa marcada por el imperialismo de los países más desarrollados (Gran Bretaña, Francia, EE.UU., etc.) que necesitaban nuevos territorios donde encontrar materias primas, a la vez que mercados, con los que consolidar el sistema capitalista y su prestigio en el mundo.
En este sentido, Estados Unidos se inmiscuyó desde 1897 directamente en los conflictos independentistas que tenía España con Cuba, Puerto Rico y Filipinas (que se habían iniciado en los años 60 del s.XIX). En febrero de 1898, la voladura del Maine fue el pretexto para la declaración de guerra de EE.UU a España, tanto en el Caribe como en Filipinas. La armada española fue derrotada por la norteamericana en Cuba y también en Filipinas. El tratado de París (diciembre 1898) puso fin a la guerra pero también supuso la pérdida de los últimos reductos del Imperio español en las siguientes condiciones:
* España renuncia a Cuba y reconoce su independencia.
* Cesión a EE.UU. de Puerto Rico (estado libre asociado), las Filipinas y la isla de Guam.
* Estados Unidos compensaba a España con una indemnización de 20 millones de $.
En los años siguientes, España liquidó su imperio colonial al vender sus últimas posesiones a Alemania (islas Marianas, Carolinas y Palaos) y a EE.UU (islas Sibutú y Gagayán de Joló). La pérdida del imperio tendrá graves consecuencias en varios ámbitos.
Bloque 8-1 Crisis de 1898. 2/4
Explica las consecuencias económicas de la crisis del 98
La pérdida de las colonias supuso algunos efectos negativos, como la pérdida de un mercado seguro para la industria textil catalana. También se resintió el abastecimiento de materias primas como el azúcar, el café o el tabaco.
Sin embargo, hubo importantes efectos positivos en lo económico pues la financiación de las guerras permitió al ministro de Hacienda acometer reformas en los tributos y emitir deuda que sanearon las arcas estatales (de este modo el Estado tuvo superávit a inicios del s.XX). La repatriación de capitales sirvió para el desarrollo de nuevos sectores industriales.
Bloque 8-1 Crisis de 1898. 3/4
Explica los movimientos que se crearon en reacción a la crisis del 98
La sociedad española siente abatimiento y frustración tras el desastre; una profunda crisis moral e ideológica (“España sin pulso” -Silvela-) que ha puesto de manifiesto el atraso de España. Los intelectuales españoles exponen los defectos que padecía la nación y sus posibles soluciones, desde dos movimientos:
* La Generación del 98 expresa la crisis de la conciencia nacional en forma más literaria, subjetiva y artística. Unamuno, Baroja, Azorín, Valle-Inclán, Machado y Maeztu toman el tema de España como asunto fundamental de sus escritos.
* El Regeneracionismo expresa el mismo juicio pesimista sobre España, pero los regeneracionistas lo hacen de forma documentada y científica. Su principal representante fue Joaquín Costa que, con su lema “Escuela, despensa y doble llave al sepulcro del Cid”, aspira a fomentar la riqueza y el desarrollo económico, impulsar la enseñanza, mirar hacia el futuro y no sólo a las glorias de pasado. Los regeneracionistas aspiraban a moralizar la gestión pública y reformar el Estado: había que acabar con las prácticas fraudulentas del régimen parlamentario y con el caciquismo para poder alcanzar una verdadera democracia.
Bloque 8-1 Crisis de 1898. 4/4
Explica las repercuciones políticas de la crisis de 1898
La derrota y la pérdida de unos 500.000 combatientes produjo una enorme conmoción social. En este sentido, creció el antimilitarismo entre las clases populares (sólo iban a la guerra quienes no podían pagar por no acudir a filas) que aprovecha el movimiento obrero para enfrentarse al gobierno. Los nacionalismos periféricos adquirieron mayor empuje y protagonismo a raíz de estos hechos, potenciándose los movimientos regionalistas; al igual que los partidos republicanos, defensores tradicionales de las tesis independentistas de las colonias.
Buena parte de la sociedad exigía, por tanto, un cambio profundo, una “regeneración” del país, sustituyendo la política de la Restauración, que protegía los intereses de la oligarquía.
Pero el desastre del 98 no provocó ningún cambio político: el sistema de la Restauración, aunque desprestigiado, se mantuvo firme gracias al consenso de liberales y conservadores, dispuestos a la alternancia. Sin embargo, a partir del reinado de Alfonso XIII (ya desaparecidos Cánovas y Sagasta) hay un relevo en los líderes de ambos partidos: Maura en el Conservador y Canalejas en el Liberal. Aunque el sistema turnista se mantenga, se comienza a hablar de “democratizar desde arriba”, para lograr unas elecciones limpias sin las prácticas fraudulentas ni la intervención de los caciques.
Bloque 8-2 Evolución de la industria española en el siglo XIX 1/6
¿Cómo era la industria española en la Restauración?
En la España de la Restauración convivían dos mundos muy diferenciados en lo social y económico:
1. Áreas agrarias del interior, con estilos de vida muy atrasadas, dedicadas al cultivo extensivo de cereales.
2. Áreas periféricas industriales (Cataluña, País Vasco y zonas del Cantábrico), que producen para el mercado interior.
Ambas áreas, sin embargo, tienen algunos rasgos en común:
* Están controladas por una oligarquía burguesa (cerealistas/harineros castellanos, siderúrgicos vascos y textiles catalanes) que rigen la vida política del país en el eje Bilbao-Barcelona-Valladolid.
* Todas las actividades económicas son poco competitivas, y se mantienen por los beneficios de la política proteccionista de los gobiernos durante casi todo el siglo.
Bloque 8-2 Evolución de la industria española en el siglo XIX 2/6
Explica el estado de la industria textil catalana durante el siglo XIX
La expansión de la industria se produjo en Cataluña en torno al sector algodonero, a pesar de carecer de las materias primas básicas: algodón y carbón vegetal. Sin embargo, el empuje de una burguesía emprendedora y el favor de una legislación proteccionista (sobre todo frente a la competencia británica) hicieron que conquistara el mercado español y los de Puerto Rico y Cuba. Hacia 1860 los textiles de algodón catalanes abastecían el 90% de la demanda española y eran el 90% de la oferta.
El despegue catalán se produjo entre 1835 y 1861, por el crecimiento de las importaciones (multiplicadas x 10), la instalación de husos mecánicos y de máquinas de vapor. Como consecuencia, Cataluña estuvo en disposición de atraer otras industrias textiles, tradicionalmente en otras regiones (lana castellana, seda de Valencia o lino gallego). La mecanización y las importaciones culminaron en el último cuarto de siglo (1876-1900, primera fase de la Restauración).
Cataluña absorbió la mayoría de la industria textil española, obteniendo un gran beneficio económico. El fruto de estas ganancias se reinvirtió en otras actividades industriales en la región (electricidad, comunicaciones, construcción…), de modo que Cataluña se convirtió en una de las zonas más industrializadas de España.
Bloque 8-2 Evolución de la industria española en el siglo XIX 3/6
Explica el estado de la siderurgia en España durante el siglo XIX
El otro sector pionero de la industrialización fue la siderurgia, una actividad lastrada por la escasez y mala calidad del carbón y por la dependencia tecnológica. Aún así, la actividad se puso en marcha en tres regiones:
1. En Andalucía, gracias a los capitales del puerto de Málaga y la abundancia de carbón vegetal, hubo altos hornos, que se cerraron en 1880.
2. Aprovechando las minas de carbón, en Asturias se construyeron altos hornos, que hacia 1868 concentraban la mitad de la producción nacional.
3. Pero la industria siderúrgica hegemónica en España es la de Vizcaya. Ello se debe a la riqueza de los yacimientos de hierro en la cuenca vizcaína orientados a la exportación y a la formación de un capitalismo vasco construido sobre la base de la venta de ese hierro al extranjero (intercambio de carbón-hierro con Gran Bretaña).
Bloque 8-2 Evolución de la industria española en el siglo XIX 4/6
Explica el estado de la industria de siderúrgica de Vizcaya durante el siglo XIX
La industria siderúrgica hegemónica en España es la de Vizcaya. Ello se debe a la riqueza de los yacimientos de hierro en la cuenca vizcaína orientados a la exportación y a la formación de un capitalismo vasco construido sobre la base de la venta de ese hierro al extranjero (intercambio de carbón-hierro con Gran Bretaña).
La explotación del hierro vizcaíno fue grande durante todo el siglo, pero sobre todo a partir de la ley librecambista de Figuerola (1869) y el final de la guerra carlista (1876). Se fundaron compañías extranjeras y vascas para explotarlo y el mineral vasco fue el más demandado por la siderurgia europea. El capital obtenido se reinvirtió en altos hornos, lo que hizo que la siderurgia vizcaína creciera enormemente y estuviera a la vanguardia; en la década de los 80, por ejemplo, se produce acero por los métodos más avanzados (Bessemer, Siemens-Martin).
En 1902, se fusionan varias compañías y se funda Altos Hornos de Vizcaya, durante décadas la empresa emblemática de la siderurgia vasca.
De la actividad minera salió el capital para el desarrollo siderúrgico e industrial vizcaíno. Se calcula que un 55% de este capital fue reinvertido en la financiación de la industria vizcaína (compañías navieras, astilleros, cementeras, metalúrgicas, ferrocarriles, etc.) y dio lugar a una burguesía pujante.
Bloque 8-2 Evolución de la industria española en el siglo XIX 5/6
Explica el estado de la minería de España durante el siglo XIX
A comienzos de siglo la minería española estaba reducida a enclaves costeros, pero la industrialización europea aumentó el interés de empresas extranjeras por las minas españolas. Al igual que la industria, creció con rapidez entre 1875 y 1900.
Una de las claves fue la Ley de Minas (1869), que liberalizó el sector, permitiendo que compañías internacionales explotaran minas y exportaran minerales en bruto con costes muy bajos. Desde entonces se instalaron en España muchas empresas extranjeras, como la Compañía Franco-Belga de Somorrostro, que exportaba el hierro vasco a Gran Bretaña; o la Rothschild, que comercializaba el mercurio de Almadén.
La presencia de capital extranjero en el desarrollo de la minería fue creciente en todo el siglo. El mineral andaluz era el más demandado, suponiendo un 50% de las exportaciones. Sin embargo, este hecho no se tradujo en inversiones industriales en Andalucía; todo lo contrario ocurrió, como hemos visto, en el caso de Vizcaya.
Los minerales más demandados fueron el mercurio, el cobre y el plomo. Por el contrario, el carbón quedó en manos españolas, protegido por elevados aranceles del Estado pues no podían competir ni en la calidad ni en precio con los carbones ingleses.
Bloque 8-2 Evolución de la industria española en el siglo XIX 6/6
Explica el balance de la industrialización
Cataluña y el País Vasco se consagraron como los núcleos fundamentales de la industrialización. El resto de regiones quedaba retrasado hasta la mitad del siglo XX, con la excepción de Madrid, capital administrativa y de servicios.
Una de las causas del retraso fue la tardía expansión del ferrocarril, fundamental para el transporte de mercancías en el siglo XIX. En 1855, durante el Bienio Progresista, se promulgó la Ley de ferrocarriles, que facilitó a compañías privadas (mediante exención de aranceles, subvenciones estatales…) la construcción de una red viaria radial incipiente, que se ampliaría mucho posteriormente, durante la Restauración (entre 1870 y 1900 se construyeron 13.000 kms. de vías). El desarrollo del ferrocarril ayudó al crecimiento de la siderurgia y la minería de carbón.
La franja mediterránea agrupó la industria textil y marcó una frontera con el interior, donde pueden destacarse enclaves parciales de industrias (conservas, harineras, aceites…)
Bloque 8-3 Gráfica de la industrialización en España 1/2
Describe la gráfica y describe los sectores
La gráfica recoge información sobre la población activa por sectores en el año 1877. A la izquierda de esta apreciamos la cantidad total en porcentaje de los respectivos sectores y actividades las cuales nombran en la leyenda que se encuentran justamente abajo; el color más oscuro corresponde a los servicios, el blanco hace referencia a la industria, minería y construcción y por último en un color gris vemos reflejado el sector de agricultura y pesca.
Antes de comenzar a analizar la gráfica con sus datos, es necesario hacer mención a los paises que participan en este analisis:
Estados Unidos, Francia, Alemania, Holanda, Reino Unido y por último España.
Comenzando con el analisis de los sectores ofrecidos vemos como España es el país que menos porcentaje ofreció en los servicios, casi a la par de Alemania y Francia con apenas 2,3% y 3,5% de diferencia respectivamente. Siendo estas tres las más bajas comparadas con Reino Unido, el cuál fue la potencia a destacar en este sector.
Continuando con el analisis de las industrias, las mineras y la construcción continua teniendo a España como el país con menos porcentaje, pero en este caso con una gran diferencia al resto de paises, pues el siguiente porcentaje más bajo correspondería a Estados Unidos con un 10%.
Y por último en el sector de la agricultura y pesca finalmente el sector en donde a diferencia de los demás paises va avanzando demostrando casi su “receso” respecto a los demás sectores. La sensación que esto mismo nos aporta es que España es un país más atrasado económicamente con respecto a los otros paises.
El sector primario en España esta inflado un 66,1% de la población se dedicaba a esto, dándonos a entender como la mayoría de la población española era rural en esa época.
El sector industrial es el más bajo en España, pues la revolución industrial por ejemplo, Reino Unido comenzó mucho antes que en España o Bélgica, los dos paises cuya revolución industrial comenzó de forma más tardía.
El sector terciario en España también es el más bajo de todos los paises representados, siendo bastante escaso.
En conclusión esta gráfica nos permite ver el atraso en el sector de los servicios y la industria, debido a problemas que ha sufrido a lo largo de este siglo, quedandose muy por detrás de otras potencias europeas y de Estados Unidos. Como resultado la población española se dedica principalmente a la actividad agraria y pesquera.
Bloque 8-3 Gráfica de la industrialización en España 2/2
Señala las causas de las diferencias vistas en la gráfica
Hubieron dos causas principales para las diferencias que presenta España durante el siglo XIX en comparación del resto de países:
* La primera de ellas fueron una serie de acontecimientos desfavorables para España: las tres guerras carlistas, la guerra de la independencia, la emancipación de las colonias… Siendo las perdidas más importantes las del desastre del 98.
* La segunda es la inestabilidad política, que impide cambiar el rumbo que sigue el país, hay continuos cambios de gobierno (liberales o moderados), además de golpes de estado y pronunciamientos militares. También hay profundos cambios en la estructura del estado, por ejemplo con la revolución gloriosa (años 60) se implanta un sistema republicano.
* Hay que señalar tres causas más de menor importancia que las anteriores, que aún así fueron importantes:
1. Las condiciones de vida progresan , se reduce la mortalidad; por lo que la población crece haciendo que la demanda también crezca; no obstante España tiene un bajo poder adquisitivo pues la mayoría de los ciudadanos eran campesinos, esto también produce que la población no crezca tanto como en el resto de Europa, por lo que la demanda tampoco crece tanto.
2. Causas económicas: la escasez de inversiones como consecuencia de que no haya burguesía emprendedora. El estado sigue siendo quien lleva la iniciativa en la industrialización. Sin embargo, muchas veces ahogado por la deuda pública va a tener una gran dependencia del exterior. Las medidas proteccionistas del Estado con la intención de eliminar la competencia extranjera van a favorecer el desarrollo de algunas industrias en detrimento de otras, por ejemplo el sector textil.
3. Las técnicas: España tiene una completa dependencia técnica de Europa muy evidente en sectores siderúrgicos, metales o textiles, pues la maquinaria proviene del extranjero (por ejemplo los telares se traen de Gran Bretaña).