2. EL SISTEMA ESQUELÉTICO Flashcards
¿Qué constituye el tejido óseo y qué desempeña?
El tejido óseo constituye aproximadamente el 18% del peso corporal y desempeña seis funciones básicas:
Sostén. Da sostén a los tejidos blandos.
Protección. Protege de lesiones a los órganos internos más importantes.
Asistencia en el movimiento.
Homeostasis mineral. El tejido óseo almacena diferentes minerales, especialmente calcio y fosforo, lo que contribuye a la resistencia del hueso. También libera minerales a la circulación para mantener el equilibrio.
Producción de células sanguíneas. Dentro de algunos huesos, un tejido conectivo llamado médula ósea roja produce glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
Almacenamiento de triglicéridos. La médula ósea amarilla está constituida principalmente por adipocitos, en los que se almacenan triglicéridos
2.1 CLASIFICACIÓN DE LOS HUESOS
Los huesos se clasifican, según su forma, en:
Huesos largos. Los huesos largos, como su nombre indica, son más largos que anchos. Tienen una capa exterior gruesa de hueso compacto y una cavidad medular interior que contiene la médula ósea. Los extremos de los huesos largos contienen hueso esponjoso.
Huesos cortos. Tienen la forma aproximada de un cubo. Contienen en su mayoría hueso esponjoso y están rodeados de una fina capa de hueso compacto. Como ejemplo tenemos los huesos del carpo.
Huesos planos. Por lo general son delgados y están compuestos de dos placas casi paralelas de tejido óseo compacto (tablas interna y externa) que envuelven a otra de hueso esponjoso. Los huesos planos brindan protección considerable y tienen áreas extensas para la inserción de músculos. Entre ellos están los del cráneo.
Huesos irregulares. Tienen forma compleja y no se pueden agrupar en ninguna de las categorías precedentes. Es variable su contenido de tejido óseo esponjoso y compacto. Este grupo abarca las vértebras y algunos huesos de la cara y la base del cráneo, como el esfenoides.
Huesos sesamoideos. Son huesos redondos u ovales que se desarrollan en los tendones. El más grande de ellos es la rótula o patela, que se desarrolla en el tendón rotuliano.
2.2 ESTRUCTURA DEL HUESO MACROSCÓPICO
La estructura macroscópica puede analizarse considerando las distintas regiones de los huesos largos. Encontramos las siguientes regiones:
* Diáfisis. Es el cuerpo del hueso (la porción cilíndrica larga y principal del hueso)
* Epífisis. Son los extremos proximal y distal del hueso.
* Metáfisis. Son las regiones del hueso maduro, en las que la diáfisis se une a la epífisis. En el hueso en crecimiento, cada metáfisis contiene la placa epifisiaria (placa de crecimiento).
* Cartílago articular. Es una capa delgada de cartílago hialino que cubre la región de la epífisis, donde un hueso se articula con otro. Facilita los deslizamientos, protege la superficie ósea e impide el desgaste del hueso.
* Periostio. Es la vaina de tejido conectivo denso que, junto con los vasos sanguíneos acompañantes, recubre la superficie ósea allí donde no está presente el cartílago articular.
* Cavidad medular. Es un espacio cilíndrico vacío dentro de la diáfisis que, en los adultos, contiene médula ósea amarilla adiposa y numerosos vasos sanguíneos.
* Endostio. Es una fina membrana que reviste la cavidad medular. Contiene una sola capa de células formadoras de hueso y escaso tejido conectivo.
Además, a nivel macroscópico también podemos diferenciar dos tipos de hueso:
- Hueso cortical o compacto. Forma la cubierta externa o corteza. Tiene alta densidad y una estructura similar al marfil. Rodea al hueso esponjoso y en su interior tiene los canales de Havers.
- Hueso esponjoso o trabecular. Está formado por trabéculas delgadas. No tiene canales de Havers. Entre las trabéculas podemos encontrar la médula ósea.